La mayoría de las tortugas golfinas que murieron en Oaxaca, atrapadas en una red de pesca ilegal, eran hembras adultas que buscaban llegar a la playa para desovar.

Tomando en cuenta las corrientes marinas y el lugar donde salió a flote el trasmallo con los más de 300 cadáveres, los ejemplares que terminaron ahogados en aguas del Océano Pacífico, intentaban regresar a depositar sus huevos al santuario La Escobilla, que ocupa el primer lugar a nivel mundial en anidadas, con aproximadamente un millón por temporada.

La distancia que existe entre La Escobilla, que en el papel es un Área Natural Protegida, y la playa de Barra de Navidad, donde aparecieron los restos de las tortugas, es de 72 kilómetros en línea recta, lo que se estima recorrió en ocho días la también llamada red agallera, —porque se atora en las agallas o branquias de los peces— desde el municipio de Santa María Tonameca hasta el municipio de San Pedro Colotepec.

José Antonio Ramírez García, coordinador de Protección Civil de San Pedro Mixtepec, fue quien el pasado 28 de agosto recibió el reporte de que pescadores de Puerto Escondido habían encontrado cientos de tortugas enmalladas.

 

FUENTE NSINTESIS